Día Mundial de la Propiedad Intelectual 2022

Las patentes, los derechos de autor, las marcas y los diseños influyen en nuestra vida diaria

La protección de la Propiedad Intelectual es esencial para fomentar la innovación, la continua búsqueda de mejores soluciones y la legitimación y amparo de sus titulares.

Las empresas y los particulares no podrían explotar plenamente sus invenciones si no estuviesen debidamente protegidas, lo que iría en detrimento de la inversión en I+D+i y frenaría el progreso de la industria y la economía. Como consecuencia final, nuestro día a día se vería afectado por esta desinversión de manera drástica.

Los derechos de propiedad intelectual actuales se remontan a dos leyes británicas establecidas durante los siglos XVII y XVIII: el Estatuto de los Monopolios de 1624 y el Estatuto de Ana, conocido generalmente como la Ley de Derechos de Autor de 1709, que otorgaba a los editores de libros 14 años de protección legal, así como 21 años para las publicaciones ya impresas. Pero los primeros casos de protección registral datan en la antigua Grecia, en el año 500 a.C., cuando a los cocineros de la colonia griega de Sybaris se les concedían monopolios de un año para la creación y explotación de recetas.

Desde entonces, las leyes de Propiedad Intelectual han evolucionado mucho y, si bien cada territorio tiene sus propias particularidades, en la mayoría de los países de todo el mundo se reconoce y se fomentan los derechos de la Propiedad Intelectual y la protección de sus titulares.

En BALDER apoyamos la constante e inevitable evolución de estos derechos de creadores, inventores, inversores, empresas y consumidores, que fomentan la innovación, la creatividad y la economía en todo el mundo.

Tomamos este día como un recordatorio especial de nuestra razón de ser y nos gustaría agradecer a todos nuestros clientes su continua confianza en nosotros durante la última década.

A medida que el mundo se adentra en la web 3, la inteligencia artificial y las últimas tecnologías de Internet que aprovechan el aprendizaje automático y el blockchain, el futuro de la Propiedad Intelectual se perfila más emocionante que nunca, con nuevos retos y oportunidades que afrontar.

¡Esperamos con muchas ganas este nuevo era de la PI!

Equipo de BALDER